Recuerdo mi infancia como una etapa muy feliz de mi vida llena de alegría, magia, inocencia e ilusión, la disfrute al máximo y lo que más añoro son esos juguetes Fisher-Price, hechos tan perfectos con el más mínimo de detalle, de un material que hoy en día no se aprecia en ningún otro juguete incluyendo los de la misma fabrica porque aunque ahora los hagan más reales y con otros diseños yo me quedo con los mios, los de los años 80. Mis hermanas y yo, compartiamos tardes enteras jugando, con la casita, el hospital, la granja, el castillo, los bomberos, la escuela, la estación de gasolina, el avión , el autobús, el ferry, el yate, bueno teníamos un montón, tanto así que formabamos una ciudad Fisher-Price y allí pasábamos horas. Mis preferidos, eran la casa familiar que se abría en dos, tenia un timbre que sonaba tan real y cada habitación estaba adornada hasta con el más mínimo detalle; la granja igual y el castillo con sus pasadisos secretos, luego estaba el carrusel y el circo con sus sonidos y alegres colores. De hecho, nuestro primer juguete fue Fisher-Price, ya que teníamos, el panel de actividades, el móvil para la cuna, un sonajero en forma de flor y otro de tela en forma de huevo, este último se lo regalaron a mi hermana menor cuando nació. Luego tuvimos juegos didácticos con figuras, el mejor era la bota en forma de carro con figuras geométricas en sus vetanitas y techo. Por supuesto no podian faltar aquellos con rueditas que los podías llevar a todas partes con un cordoncito, como el perro Basen House, el coco, el telefónito,la vaca que en cordón traía una bocina que al apretar emitía el sonido típico de una vaca, además del toca discos, el view master, el teléfono con pizarra. En fin podría nombrar muchos más, algunos los pueden ver en el Slide Show de este blog. Espero que les guste y les traiga recuerdos como a mi.
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